-NOCHES EN VELA-


A las piedras del sol quebrado,
la historia que ayer me contabas,
las noches calladas, haciéndome la tonta,
el amor, que está a prueba de bocas.

Los caudales rosados de tus sonrisas
forzadas, nunca te declaraste culpable
de tus ojos libres y tus palabras inesperadas,
tengo miedo de que nunca más vuelvas.

Pides que te agarre fuerte por si te
pierdes, al aire vuelve, en la caída en picado,
lo desafiante, nadie sabe, las alas
dibujaste y luego borraste.

La banda sonora de la primavera, la tamborada
al finalizar, nos miramos sin disimular, los
árboles cantan sin cesar, tanto nombrarte y
yo sigo aquí, soñándote.

Qué cerca te siento y qué lejos estás, me
siento liberada en este mar lleno de preguntas
incansables que te dejan sin suspirar, porque
a veces somos la piedra y otras el cristal.

Estamos tan cegados que no vemos la
realidad y no nos enteramos ni de la mitad,
porque estamos cansados de reír y disfrutar
sin apenas querer ni demostrar.

Y a día de hoy no tengo aún claro quién es
más valiente si el que se queda o el que se va,
no seas cárcel, deja ir a quien quiera irse y
quédate con quien te llame hogar.


LAURA GÓMEZ FAJARDO.




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